La totalidad de nuestro empresariado sólo
exporta un paupérrimo 3%, es decir, todas las empresas privadas en
Venezuela apenas generan un ridículo 3% (2 mil 700 millones de dólares de
EEUU -2012- ) del total de divisas que ingresan al país[i].
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La década de 1990 se caracterizó por precios del
petróleo realmente bajos. Siendo 2002 y 2003 años de renta baja, ya para el
2004 se experimenta un salto enorme (39% de incremento en las exportaciones) y
se abre un ciclo de bonanza petrolera.
Ese enorme auge exportador ha tenido su correlato
en un espectacular (y nocivo) incremento de las importaciones, que ratifica
nuestra escasez productiva y la ineficiencia crónica del empresariado local.
Más aún, la sobrevaluación del tipo de cambio ha
creado el negocio de la importación fraudulenta, es decir, de miles de
empresarios que se dedican a sobrefacturar importaciones o simplemente piden
dólares y no acarrean ni una de las mercancías que ofrecieron traer.
Es importante reflexionar acerca del uso que el
Estado le ha dado a la renta petrolera y el afán de usarla para gastos de
naturaleza improductiva.
De la misma forma es incomprensible la no
utilización de la renta en un plan nacional de industrialización estatal
masiva, que amerita el país para dejar atrás lastres tecnológicos y
dependencias técnicas en los más diversos sectores.
Las alocadas variaciones en la importación, se
muestran en la tabla 1.
Tabla 1:
La
relación entre las importaciones y las exportaciones del sector privado
En Venezuela el 97% de las divisas las genera el
sector estatal de la economía.
La totalidad de nuestro empresariado sólo exporta
un paupérrimo 3%, es decir, todas las empresas privadas en Venezuela apenas
generan un ridículo 3% (2 mil 700 millones de dólares de EEUU -2012- ) del
total de divisas que ingresan al país[i].
Para tener una idea de lo bajo de la exportación
privada, es interesante saber que la exportaciones privadas en el Uruguay
(con 3,3 millones de habitantes) fueron cinco (5) veces más elevadas que las
del empresariado local en Venezuela. Sin embargo, ni cortos ni perezosos,
nuestra clase capitalista en el año 2012 importó la bicoca de 43 mil millones
de dólares de EEUU.
Lo que queremos mostrar a simple vista, es la más
absurda DESPROPORCIÓN entre las divisas que genera el capital privado en
Venezuela y las divisas que exige para su funcionamiento. Es delirante que
habiendo un control de cambio el gobierno traslade (anualmente) alrededor de
43 mil de millones de dólares de EEUU preferenciales a la burguesía local,
para que está genere la miserable suma de 2,7 mil millones de dólares de
EEUU.
Las
DESPROPOCIONADAS importaciones del sector privado
La escasez de exportaciones privadas, se debe
principalmente a la nulidad productiva del empresario local, es decir, su
absoluta y manifiesta incapacidad para competir en el mercado internacional,
por ser abiertamente ineficiente en la producción de mercancías. En términos
dialécticos-materialistas, se puede afirmar que el empresario local produce
sus mercancías con: exceso de tiempo de trabajo necesario, es decir, produce
mercancías muy por encima del tiempo de trabajo abstracto socialmente
necesario, requerido para la producción normal de una mercancía.
Lo que se observa en la tabla Nº 2, es que el
Estado venezolano ha vendido al empresariado local (extranjeros y venezolanos
cuyo ámbito de explotación de la fuerza de trabajo, se circunscribe al
territorio nacional) más de 317 mil millones de dólares a precios preferenciales,
es decir, vendidos a precio oficial que en el mercado paralelo (año 2013) se
consiguen a precios 500% más elevados.
Tabla Nº 2:
Aunque el control de cambio frenó en 2003 la
escandalosa fuga de divisas, desde el 2004 en adelante no ha hecho más que
potenciar la hemorragia de divisas. Los cálculos más conservadores muestran
que la burguesía local se ha apropiado y luego depositado en el extranjero,
más de 145 mil millones de dólares de EEUU, desde el 2003 hasta el 2012.
Dicha cantidad equivale a la construcción de cien (100) líneas -número 5- del
tren subterráneo en Caracas.
De acuerdo al Banco Mundial, el cumplimiento de
las Metas del Milenio (entre las cuales se encuentran la erradicación del
hambre y la pobreza extrema en el mundo, así como educación primaria
universal) requeriría “apenas” entre 40 y 60 millardos de dólares por año [ii].
Peor aún, los 317 mil millones de dólares preferenciales
habilitados para que la burguesía local importe (muchísimo más dólares que lo
que la economía venezolana realmente requiere), se ha traducido en un clima
de escasez, desabastecimiento y reducción drástica de la calidad y
disponibilidad de mercancías en el país. Todo esto indica a las claras, que
la mayor cantidad de importación es FRAUDULENTA, simplemente no existe.
Un ejemplo de ello es lo que ha pasado con la
importación de fármacos. Según vemos en el gráfico 1, ha habido una
absolutamente desproporcionada importación de los mismos, que en nada puede
sugerir algo positivo.
Gráfico 1, importaciones anuales de fármacos, en
dólares de EEUU:
Muy lamentable es el aumento en la importación de
productos farmacéuticos, que para el período 1998-2012 alcanzó la astronómica
cifra de 1358%. En ese caso juegan tres cosas:
1. Las otrora fábricas de medicamentos
(transnacionales) han migrado a otros países y se han convertido en
importadoras-distribuidoras de medicinas.
2. Las importaciones que realizan estas empresas
poseen evidentes sobreprecios que les permiten apropiarse de dólares a Bs.
6,3, que posteriormente venden a Bs. 40 (precio a septiembre de 2013, en el
mercado “paralelo”), arrojándoles ganancias siderales.
3. Estas empresas usan los llamados “precios de
transferencia”, para eludir impuestos por la vía de híper-inflar
artificialmente sus costos, para trasladar toda su ganancia a su sede
central. ¿Un ejemplo [iii]? Una aspirina cuesta 0,01 $. Pero ellos la
importan a 0,99 $. Al revenderla a 1 $ (Bs. 6,3), su ejercicio contable les
arroja una “ganancia ficticia” de 0.01 $. Sobre esa base se le imputa el ISLR
y por arte de magia, se convierte una enorme tasa de beneficio en una
miserable contribución al fisco de 0,003 $. Un negocio que haría enrojecer de
envidia, al narcotraficante más exitoso.
Las
antiguamente reducidas importaciones del sector público….
Hasta el año 2004 las importaciones estatales se
mantuvieron a niveles muy moderados, debido a lo bajo del precio del petróleo, y por ende,
del ingreso por exportaciones. La sobrevaluación de la moneda no era tan dramática
y el gobierno bolivariano desarrollaba políticas de asistencia social
bastante limitadas.
Es de entender, que el Estado asumía menos gastos
y que se suplía con compras mayoritariamente nacionales. Pero el rápido
decuplicar del precio del petróleo (que representa el 95% de las exportaciones
del país) retrotrajo al país a una bonanza que tuvo en un tipo de cambio
extremadamente sobrevaluado, su clímax rentístico.
En el gráfico 2, aparece la grandilocuente curva
de ascenso que revela el trasegar de unas importaciones estatales que para el
período 2003-2012 tuvieron un crecimiento astronómico de 894%. Para un
gobierno que se vende como nacionalista, el descocado aumento en la
importación muestra que un plan de sustituir importaciones por producción
nacional luce más que lejano. La importación no ha redundado en un incremento
del peso industrial-manufactura en el PIB, que pueda permitir imaginar a una
Venezuela futura cuyos ingresos centrales no dependan exclusivamente del
petróleo.
Gráfico 2:
La drástica caída de las divisas que dan liquidez
a las Reservas Internacionales
Según el BCV, sus propias reservas
internacionales en divisas a mediados del año 2013, alcanzan la paupérrima
suma de 3 mil millones de dólares de EEUU [iv]. Decimos que es una cifra ridículamente
baja, porque en el año 1997, con el precio del petróleo a 9 dólares de EEUU,
las Reservas en divisas, alcanzaban la suma de 13 mil millones de dólares de
EEUU. Las reservas en divisas de 2013, equivalen a sólo un 22% de las
contabilizadas en 1997[v]. Ni hablar que ahora se importa más del cuádruple
de lo que se importaba en el año de 1997. La situación para el 2013 evidencia
que las Divisas disponibles sólo alcanzan para menos de un mes.[vi]
En el Gráfico Nº 3 elaborado por los
investigadores del CIFO: John Caicedo y Nadesda Muñoz, se muestra la relación
entre divisas y tipo de cambio para el período 1997-2013.
Gráfico 3[vii]
La nacionalización del comercio exterior a través
de una Central Estatal Única de Importaciones (CEUI)
La forma básica de frenar el desangre de divisas
y la espiral dramática: devaluación-inflación, es crear una CENTRAL ESTATAL
ÚNICA de IMPORTACIONES (CEUI), que destruya el ámbito especulativo a la
parásita burguesía-especuladora-importadora venezolana. El gobierno, con su
control de cambio y asignación de divisas preferenciales (a precio 5 veces
menor que el que indica el mercado paralelo de divisas) ha creado un
mecanismo fabuloso para transferir renta petrolera a la burguesía: la
importación de mercancías con tipo de cambio sobrevaluado y su reventa a precios
de oro. Con este dispositivo se han hecho fortunas enormes y el país se ha
sumido en la miseria improductiva.
Peor aún, este modus operandi tiende a empujar el
precio del dólar paralelo de forma vigorosa. Dicho dólar es referencia
central del empresario en la fijación de precios. Por ende, a medida que el
precio de este dólar paralelo aumenta, aumentan los demás bienes y servicios
de la economía, que escapan a las regulaciones primarias del Estado. Este
proceso enciende la espiral inflacionaria-devaluatoria, disminuye de manera
muy notoria el salario y abre huecos fiscales de características bíblicas.
Urgen los cambios radicales y profundos… (Hacia
la izquierda). alemcifo@gmail.com www.alemcifo.org Centro de Investigación y Formación Obrera CIFO-ALEM.
[i] Estos datos están en “Exportaciones e
Importaciones de ByS” del BCV.
[ii] Munevar, Daniel. Deuda Pública Externa en
los Países del Sur: ¿Un Problema Superado? Fecha de publicación: 5 de abril
de 2013. Artículo disponible en http://cadtm.org/Deuda-Publica-Externa-en-los
[iii] Obviamente el ejemplo no se basa en cifras
reales.
[iv] Cifras oficiales del Banco Central de
Venezuela.
[v] Datos extraídos directamente de las
estadísticas del Banco Central de Venezuela (BCV) en su cuenta: Posición De
Los Activos Y Pasivos De Reservas Del Bcv.
[vi] Parte de esta disminución se corresponde a
la conversión de divisas en oro sólido, hace unos meses. Sin embargo, esto no
puede ser razón suficiente para el sostenimiento de niveles tan bajos en las
divisas disponibles.
[vii] Jhon Caicedo y Nadesda Muñoz. La
dolarización en Venezuela: solución a la crisis o crisis sin solución ¿What
is the problem? Fecha: 13-08-2013. Artículo por publicar. Gráfico construido
según la data disponible en BCV (2013) Reservas por instrumentos posición de
los activos y pasivos por instrumentos. Colaboración especial para LatinPress®. LPs.
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