Tres tendencias. La primera
plantea que Nicolás Maduro debe salir de inmediato. Este grupo llama a un
golpe y habla de “salidas constitucionales”. Un segundo sector lo integran
quienes están por hacer actividad política dentro del cronograma electoral.
No son partidarios de seguir con lo de la “ilegitimidad”, ni consideran las
elecciones de diciembre un plebiscito.
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Flash Rojo
SI PARA ALGO PUEDE SERVIR la ley
habilitante es para ver si se logra repatriar al menos una parte de los
20.000 millones de dólares que el Gobierno dejó que se fueran en dividendos o
se cogieran las empresas de maletín. Esta es la propuesta de Rafael
Uzcátegui, del PPT, que hace referencia a los acuerdos internacionales sobre
la materia. Lo primero sería conocer la lista de los que recibieron dólares y
no trajeron nada. Investigar, sancionar y repatriar.
SIGUE SIENDO UN MISTERIO quién
autorizó en el alto gobierno la detención del vasco Asier Guridi Zaloña. El
plan inicial era el de una deportación-exprés, sin juicio de extradición, en
un avión enviado por la policía española.
Luego vino la denuncia pública y al detenido lo pasan del Cicpc al
Sebin. Huele a madrugonazo, porque fue justo cuando estaban saliendo de viaje
Maduro y Jaua.
CLARO ESTÁ QUE las
ciudades de Estados Unidos no son “las más seguras del mundo” como han
afirmado quienes critican la decisión de Maduro de no ir a la ONU. ¿Dónde
mataron a Kennedy? En Dallas. ¿A Orlando Letelier? En Washington. ¿Las
torres? Nueva York. Pero también hay
que hacer notar que el Presidente no explicó con precisión cuál fue el motivo
por el que decidió no ir a la asamblea de ese organismo. ¿Las visas?
¿Provocación? ¿Atentado? ¿El avión Airbus?
Flash Negro
EN LA OPOSICIÓN SE HAN conformado
tres tendencias. La primera plantea que Nicolás Maduro debe salir de
inmediato. Este grupo llama a un golpe y habla de “salidas constitucionales”.
Un segundo sector lo integran quienes están por hacer actividad política
dentro del cronograma electoral. No son partidarios de seguir con lo de la
“ilegitimidad”, ni consideran las elecciones de diciembre un plebiscito. En
tercer lugar está el sector de los que no se pronuncian, o apuestan a los dos
tableros. Haga el lector su propio ejercicio y ubique los partidos y
dirigentes en estas categorías.
LOS SUPEMERCADOS, por
lo general, tienen cerradas las cajas en un 40% o 60%. Dicen que por los día
libres y vacaciones. Pero pudieran contratar un personal adicional. No hay
necesidad de milicianos. Ganancias tienen, sobre todo en los rubros que
compran a 6,30 y venden a 50. ¿Quién puede creer que cierran las cajas sin
una segunda intención?
LAS REGULACIONES IMPUESTAS por el
Gobierno a las clínicas privadas han tenido como respuesta una campaña de
medios sobre las deficiencias del sector público, un punto débil que ha sido
inteligentemente explotado por las agencias de publicidad contratadas. Un
trabajo publicitario del mismo tipo ha venido realizando también la empresa
acusada de las operaciones de los llamados “bolichicos” con las plantas de
electricidad. Y, al parecer, no se han quedado atrás las transnacionales
mineras desplazadas por los chinos.
Desde la Sala Situacional
Cañonazo económico
Ciertamente,
la historia muestra cómo los gobiernos de izquierda en el continente han sido
objeto de ataques desde diferentes ángulos para desalojarlos del poder. Lo
ocurrido en el Chile de Salvador Allende es un buen ejemplo, en particular en
lo que se refiere a las técnicas para dislocar la economía por medio de
acciones programadas desde arriba. Destaca el paro de transportistas y la
reducción de la producción. Estas iniciativas se realizaron de manera
programada y fueron organizadas por un centro de dirección. El rasgo
distintivo de esos actos era que se trataba de operaciones predeterminadas, y
no simples reacciones espontáneas de los agentes económicos frente a la
coyuntura.
GUERRA
Sin
embargo, no puede dejarse de mencionar que las actividades destinadas a
desestabilizar la economía chilena se superponían a problemas reales, como el
déficit presupuestario, la emisión de dinero inorgánico y la baja productividad. La confluencia de
esas dificultades con acciones deliberadas, como el acaparamiento y la
especulación, desequilibró al país y facilitó el golpe de Estado.
BACHAQUEO
Habría
que estudiar en qué medida la coyuntura actual venezolana se asemeja a la
chilena. Ya se sabe que la riqueza petrolera pone una diferencia, pues ha
permitido amortiguar la reacción de quienes se oponen a las políticas
sociales de redistribución del ingreso. Por otra parte, no es evidente que en
Venezuela el bachaqueo, los viajes raspa tarjetas, la reventa de los
buhoneros o la lentitud en las aduanas se deba a saboteo. Claro, en algunos
casos puede hablarse de acciones orquestadas, como la decisión de los
supermercados afiliados a ANSA, que casi siempre mantienen las cajas de
cobranza cerradas en un 40% o 60%. Dicen que por los día libres y vacaciones,
pero se sabe que las ganancias dan para contratar un personal adicional, y no
lo hacen. No hay necesidad de milicianos. ¿Quién puede creer que cierran las
cajas sin una segunda intención? Ahora bien, no todas las complicaciones que
se presentan son calculadas o piezas de una guerra económica.
20,000 MILLONES
No
puede obviarse tampoco que una parte
del problema reside en errores cometidos por el Gobierno en sus políticas
macroeconómicas y en la ineficiencia en el manejo de los recursos públicos, hasta
el punto de que, en apenas tres meses, se esfumaron 20.000 millones de
dólares que estaban destinados a importaciones, lo que ha limitado al mínimo
los suministros disponibles. Por eso esta guerra económica tiene un rasgo
adicional, específico, el llamado “fuego amigo”, es decir, los disparos
provenientes del mismo bando, como el atronador cañonazo de esos 20.000
millones de dólares.
El Socialismo en la Historia
Existencialismo
Una
mesa en la esquina de un café, cigarrillos en los labios, bolsillos llenos de
papeles, una boina tal vez. Existencialistas hay muchos, los hay cristianos y
los hay ateos, siempre envueltos en reflexiones sobre el aislamiento del
hombre, lo absurdo de la existencia en medio de un universo indiferente,
frente al cual más vale la intuición inmediata sobre la gente o situaciones
de la vida que las teorías del conocimiento.
Sin
embargo, el existencialismo de Jean Paul Sartre (1905-1980) es distinto,
menos introvertido, porque descubrió, luego de su participación en la
resistencia contra el nazismo, que el hombre es un ser social y no un simple
individuo aislado. “Me percaté del peso del mundo, de los lazos que me unían
a los demás”, afirmaría en 1945.
Así
pues, a partir de la idea tan propia del existencialismo, de que el hombre
existe cuando se enfrenta a situaciones concretas y elige un camino ante
ellas, Sartre considera que le corresponde definirse y actuar ante un mundo
abrumado por las desigualdades sociales y el colonialismo. Solo de esta
manera puede lograrse autenticidad y existencia plena. En el momento en que
asume esta perspectiva hace su encuentro con el marxismo, del que afirma en
sus Cuestiones de método (1957) que es “la filosofía insuperable de nuestro
tiempo, el horizonte de toda cultura”.
Marx
nutre a Sartre de una visión materialista y de una comprensión de las luchas
sociales que mueven la historia. Y, a su vez, el pensamiento marxista es
renovado desde su interior por Sartre, cuando éste reafirma la importancia de
la dialéctica, cuestiona el determinismo económico y la deriva estatista, y
resalta la idea del individuo y la libertad. Marxismo y existencialismo, un
encuentro de dos mundos que tuvo sus momentos de gloria que hoy parecen
olvidados. Pero tal vez regrese, inesperado, ese tiempo de definiciones.
Existencial. Colaboración
especial para LatinPress®. LPs.
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