Es
importante señalar dos puntos de interés. El primero es que muchas mujeres
alcanzan el orgasmo con mayor facilidad mediante el estímulo manual o bucal
de los genitales que con el coito, lo cual debe ser tenido en cuenta por
muchas parejas que intentan en cada ocasión alcanzar un orgasmo mediante la
estimulación coital. El segundo es la tendencia a eliminar cualquier tipo
de juego sexual cuando el coito no es posible debido a una enfermedad
(física o mental) o a una disfunción sexual.
Toda una gama de
caricias, besos y actividades sexuales no coitales, el llamado petting por los anglosajones, integran
el juego sexual.
En el hombre,
este “ritual de apareamiento” puede conducir o no al coito y puede llevar o
no al orgasmo aunque, en general, se produce una progresión desde las
caricias iniciales al coito.
Las pautas de
conducta durante el juego sexual
son muy variables, tanto en las distintas especies animales (sólo a partir de
los primates podemos hablar de verdaderas “caricias”) como en las diversas
culturas humanas.
Entre las
conductas más extendidas hallamos el beso, la estimulación de los senos y de
los genitales. En la sociedad occidental, el juego sexual es practicado con
más asiduidad en los niveles medios y altos, mientras que en los niveles más
bajos existe una tendencia a prescindir de estos comportamientos y a pasar
directamente al coito.
Es importante
señalar dos puntos de interés. El primero es que muchas mujeres alcanzan el
orgasmo con mayor facilidad mediante el estímulo manual o bucal de los
genitales que con el coito, lo cual debe ser tenido en cuenta por muchas
parejas que intentan en cada ocasión alcanzar un orgasmo mediante la
estimulación coital. El segundo es la tendencia a eliminar cualquier tipo de
juego sexual cuando el coito no es posible debido a una enfermedad (física o
mental) o a una disfunción sexual.
No debe olvidarse
que el juego sexual no sólo es un medio para al coito, sino que tiene un importante valor por sí mismo
y puede cubrir perfectamente las necesidades afectivas y sexuales de una
pareja. Colaboración especial para LatinPress®. LPs.
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