sábado, 16 de junio de 2012

Para Los Consejos Comunales...



Me llegó esto y me preocupa, porque con la empresa local de cemento pasó algo parecido. Y no sé si la han podido recuperar. Y después del excelente discurso del Presidente el día de su inscripción en el CNE, donde recuerdo que hizo énfasis en el impulso al Poder Popular, (consejos comunales, etc.) hemos venido observando quedesde el PSUV Táchira están creando "instancias" que no están en la Ley, que se atravesarán entre lo que han venido siendo los C.C. y la creación de las Comunas.  Y sin ningún empacho nos dicen que eso se hace porque "vienen los proyectos macro...", y que "el pueblo no está maduro" para manejar dineros, ni impulsar proyectos. Discurso parecido al de la derecha. Y emitido por personajes que en su "formación" dejan mucho que desear. Además de que son una especie de "funcionarios" del partido, enllavados con burócratas de
Fundacomunal, Ministerio de las Comunas, etc. que jamás han pertenecido ni participado en Consejo Comunal alguno. La verdad es que cuando creen que se avecinan "cascadas" de dinero, aparecen los burócratas tratando de castrar al poder popular y pretendiendo manejar y controlar, dineros dizque de proyectos "macro".

Para ello violentan toda las leyes y normas existentes, y nos dicen (como ya antes lo he escuchado) que 
"desde Caracas" ordenaron tal o cual cosa... (cuando son "ellos" los que inventan cada vaina rara),  
lo que trajo la "corrida" de la gente, del partido y de la revolución.

En buena parte, gracias a chanchullos como los que hicieron cuando trampearon a la militancia luego de que Chávez pidiera que se crearan aquellos "batallones", y que en ellos no participaran los representantes del "poder constituido", se construyó el camino hacia el fracaso electoral en el Táchira.

En aquel entonces, no solamente se hizo todo lo contrario de lo que dijo Chávez, sino que fueron más allá, al montar trampas de todo tipo, para quedar (como fuese) controlando las "delegaciones" de aquellos batallones, para auto-designarse candidatos a diputados, concejales, y demás fauna electorera. Para ellos crearon batallones piratas, batallones fantasmas (inexistentes), y cuando advirtieron que todavía con esas primeras trampas podían ser 
arrollados por las bases del partido, crearon los llamados batallones "laborales", en empresas y organismos del estado, para pasar por encima de lo que decidía el pueblo llano.

Cuando la gente, la militancia del partido observó aquella vulgaridad, se fue del partido, 
no volvió a reunirse en sus batallones, y -al menos en el Táchira- se mató el voto que jode,
y se perdieron las elecciones.

Ahora, en pleno año electoral, están inventando nuevos mecanismos antidemocráticos, validando 
"(s)elecciones" de sumisos que se pliegan a los intereses de la burocracia, empeñada en no dejarle paso al poder popular.  Y corriendo -otra vez- a un montón de personas, a quienes no les gusta que las trampeen. Porque si creamos leyes
para construir el poder popular, y burlamos sus contenidos una y otra vez, la gente correcta (que yo creo que hace la mayoría en nuestro país) se va... se aleja... No sé si esa es la intención oculta...

...

Manuel Rugeles



LA  RUINA  DE  GUAYANA

Es de recordar  aquella reunión de Chávez en Alcasa el 15 de mayo de 2010 en la que inauguró la etapa del llamado “control obrero”. Fue una “cadena” en local cerrado con un grupo de activistas sindicales del PSUV de la que excluyeron con sectarismo, a toda la legítima dirigencia sindical independiente,  a aquellos que son de la alternativa democrática  e  incluso a muchos psuvistas que no eran del grupo dominante.
Una “cadena” donde designó a un grupo de presidentes de las empresas básicas diciendo que eran “presidentes-trabajadores” y que esos eran “los que los trabajadores habían seleccionado”,  cosa que,  como sabemos,  nunca fue cierta.  Fue un simple reparto burocrático dando unas empresas a unos grupos internos del PSUV y dejando otras empresas a otros sectores internos.
Lo más grave fue cuando dijo “me la juego con ustedes”,  es decir:  le colgó la responsabilidad de lo que iba a ser un fracaso seguro, “a los trabajadores”. Injustamente, porque los trabajadores nada tenían que ver con esas designaciones,  sino un sector político.  Y más grave porque jamás otorgó los recursos de inversión para recuperar la capacidad de producción de las empresas, que ya estaban severamente lesionadas y eso que no había llegado la “crisis eléctrica”.  Ya andaban con lo del “cuento chino del fondo chino”, que al final fue exactamente eso:  un cuento.
Aquella vez muchos trabajadores rechazaron el espejismo. ¿Se acuerdan? Cientos de trabajadores reclamaron que aquello era “el des-control obrero para controlar al obrero”. Algunos se ilusionaron pero muchos advirtieron que al no hacer inversiones ni designar a los más capaces estaba condenando a más ruina a las empresas y que luego iba a decir que era  “culpa de ustedes los trabajadores… me las jugué por ustedes y no respondieron”. Era un truco. Como el de “cambiar espejitos por oro”. Buscando votos para que el cogollo gobernante acumulará más poder pero ilusionando al trabajador. De aquello no queda casi nada. El domingo en la tarde Chávez (¿o Jaua?) despidieron al presidente-trabajador de Venalum.  Como antes despidió al de Alcasa y antes al de Minerven.  ¿Dónde está el “control obrero”?
¿Cuál será el nuevo truco para ilusionar a algunos trabajadores y hacerles creer que “estamos construyendo la patria nueva en revolución”?  Creo que el nuevo truco serán “los consejos de trabajadores”.  De nuevo “espejitos a cambio de oro”. Seguir violando los contratos colectivos, quitarle los beneficios sociales al trabajador, confiscarle las prestaciones, hacer más honda la ruina de las empresas para que parezca “un favor que les hago de mantenerles el empleo” y “dejar para una ley especial” posterior  lo que convertirá a los sindicatos en “jarrones chinos” decorativos e inútiles. Quien tenga ojos que vea.  Está en la nueva LOT.  Lo del control obrero sirvió para estirar las esperanzas un par de años.  Ahora viene con los  “Consejos”.
Esos “consejos de trabajadores” del “poder popular”,  no nacerán del sufragio ni de elección alguna, es decir,  vendrán  “del dedo”  del patrono gobierno y el PSUV con el cuento de que “solo los revolucionarios pueden entrar”.  Poder “popular” controlado y manejado.  Para que nadie se engañe.
Ahora, vuelven los “forasteros” del gobierno a dirigir improvisadamente las empresas de Guayana, como sucedió ya varias veces antes.  Hace rato que el gobierno castiga a Guayana con ministros que pretenden dirigir desde Caracas o que se traen sus “panas”.  Sanz se trajo su clan de Guatire.  Khan ni pisaba suelo de Guayana.  El de ahora,  Menéndez,  en seis meses que tiene en el cargo solo ha hecho una  “visita de médico”.  Y ahora manda para Venalum a otro que apenas conoció hace 15 días !
Durante 30 años y hasta hace 6 años,  Venalum era una planta muy moderna, al tope de su capacidad de producción, que pese a algunos vicios usuales en las empresas estatales hasta arrojaba ganancias y le daba al país 430 mil toneladas de aluminio al año, la mitad de las cuales se vendían dentro de Venezuela para transformarlas y el resto se exportaba trayendo divisas a Venezuela. A mi parecer, eso era insuficiente e insatisfactorio. Había que luchar para que cada vez más de esas 430 mil toneladas, se transformaran dentro de Venezuela en productos de alto valor agregado.
¿Cuál es el resultado en el año 14 de la “revolución”?  ¿Acaso ahora se procesa más cantidad de aluminio dentro de Venezuela?  ¿Acaso hay 10 ó 20 nuevas empresas medianas transformadoras del aluminio,  generadoras de empleo y más riqueza?  Pues lo contrario.  La “revolución” no ha sido capaz de crear ni de estimular a que otros inviertan en ni una sola nueva empresa transformadora que aporte valor agregado.
Y para colmo,  han destrozado Venalum,  que ahora sólo tiene capacidad de producir un 25 % de lo que siempre produjo.  Tenemos 75 % menos aluminio y cero valor agregado.   ¿ Logros” de la revolución ?
En medio de esa terrible destrucción y tras haber agotado el ensayo del “control obrero”, que nunca controlaron los obreros sino los burócratas del PSUV, el gobierno culpable de todo este desastre envía un forastero que nunca trabajó en Venalum ni conoce el aluminio. Y sus primeras palabras son para decir que él va a “rediseñar a Venalum en función del nuevo modelo económico que estamos construyendo”.
¿Lo va a decir en el año 14 del  “modelo” destructivo que destrozó a Venalum?  ¿Acaso representa a un gobierno que se instaló en Venezuela hace 6 meses y no tiene nada que ver con este desastre o al gobierno responsable de que a Venalum le queden solo 245 de sus 905 celdas?  Se repite la historia de Alcasa que también la iban a “rediseñar” y ya vemos en que terminó la cosa.
Esos forasteros que se creen “salvadores” son muy peligrosos porque vienen, destrozan y luego se van felices y buchones y nos dejan a la gente de Guayana el pantanal de ruina. Ya tenemos una lista muy larga de individuos así en estos 14 años. Por lo demás, al “sabihondo rediseñador” es necesario decirle que sin aluminio no hay nada que transformar ni nada a lo que dar valor agregado. Y su gobierno nos dejó casi sin aluminio.
El cambio también era (o es) para Bauxilum.  Ayer algunos de los voceros oficialistas de Bauxilum amanecieron con tono crítico muy acentuado. Y señalando una gran verdad: la ruina de Bauxilum (a la que calificaron de “extrema gravedad”) es producto en primer lugar de “la desinversión”. ¡Vaya! Lo dijeron. Al fin. La falta de inversión o el abandono de las inversiones que es responsabilidad del propietario de Bauxilum, es decir, el gobierno. Quien la ha abandonado es el gobierno “revolucionario”.  Queda claro en esa confesión que aquello del “cuento chino del fondo chino” era eso: un cuento para alargar la agonía.  Y que “el préstamo socialista que yo les hago” fue otro fracaso y una coba. No hay inversiones.
Eso explicaría el cambio “de línea” de los declarantes. Querían “dejar claro” que la responsabilidad de que Bauxilum haya producido en 2009, 2010, y 2011 entre 35% y 45% menos es responsabilidad del  “abandono de las inversiones”,  es decir,  del alto gobierno  y  no de ellos.
Aquí, en Guayana, el desastre no se puede ocultar…

Venezolana del Aluminio (Venalum).  Empresa básica, fundada en julio de 1978, productora de aluminio primario en lingotes. Le compra la materia prima (Alúmina) a Bauxita del Aluminio (Bauxilum). Tiene en nómina 3.500 trabajadores activos.
Aluminios del Caroní (Alcasa).  Fundada en agosto de 1967. Tiene similar objeto de Venalum y cuenta en su haber con 3.400 trabajadores directos.  Al llegar Chávez al poder en febrero de 1999 tenía 6 años dando pérdidas.  Era la única que estaba en números rojos.  Ahora se encuentra en terapia intensiva.
Todas las empresas básicas en la actualidad dan perdidas.
Aquí en Guayana, nunca habíamos vivido una época como ésta.  Algunos recuerdan la de Luis Herrera,  pero,  ésta es peor…

Félix Ramón Rodríguez
C.I. 2.741.475
Barcelona
2 de mayo de 2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario